¿Por qué dejar tu sonrisa para septiembre cuando puedes convertirla en la protagonista de tu verano? Todo el mundo se merece sentirse bien consigo mismo y con su salud oral en cualquier época del año, pero especialmente durante el período estival. Por eso, ¡tenemos buenas noticias para ti!
Aunque pueda extrañarte, el verano es una época perfecta para renovar la sonrisa y comenzar tu tratamiento de implantología oral.
Los implantes dentales son la solución odontológica idónea ante la pérdida de una o varias piezas dentales, ya que, gracias a los últimos avances en esta disciplina, conseguimos devolverle a la sonrisa su funcionalidad y estética con un acabado prácticamente equivalente al de los dientes naturales. Por eso, desde Clínica Blanc, tu centro experto en implantes dentales en Mahón, queremos explicarte por qué esta época es tan beneficiosa para dicho tratamiento.
El verano pone todo a tu favor para apostar por tus implantes dentales
Además de que esta estación nos ayuda a relajarnos y alejarnos del estrés, son varias las razones por las que te aconsejamos colocarte implantes en esta época del año. ¡Te las contamos!
- Flexibilidad para planificar las sesiones. Los implantes en dos fases necesitan un tiempo de osteointegración de aproximadamente tres meses desde que se inserta la raíz hasta que se acaba el tratamiento con la colocación de la corona. Durante ese tiempo, es probable que tengas que acudir varias veces al dentista, por lo que es preferible que sea en una época en la que te puedas planificar más fácilmente.
- Mejor salud. Las altas temperaturas mantienen a raya, por norma general, a los virus y resfriados comunes que podrían alterar el proceso de cicatrización. Por lo tanto, nuestro sistema inmune se fortalece en verano, lo que lo convierte en un momento ideal para el tratamiento de implantes dentales.
- El mejor momento para estrenar sonrisa. Los implantes dentales consiguen renovar la sonrisa por completo, con un acabado muy natural y con una gran durabilidad (la vida media de los implantes dentales se sitúa entorno a los 20 años). El verano es la época de los planes, los viajes, las reuniones sociales y los eventos por excelencia, por lo que no se nos ocurre un momento mejor para lucir una sonrisa renovada y sin complejos.
- Al realizarte el tratamiento durante un posible período de vacaciones, la gente con la que tratas habitualmente no se dará cuenta del cambio, dándote un extra de confianza a la vuelta del verano.
No retrases una decisión tan importante y vive esta estación por todo lo alto. Contacta con nosotros para una valoración personalizada de tu estado de salud bucodental ¡y vive el verano que mereces!